La inasistencia alcanzó al 75% de los votantes piden nulidad del proceso
Elecciones fraudulentas y sin electores en Honduras
Bajo férreas medidas de seguridad y en medio del triunfalismo de los golpistas que proclamaban una elevada asistencia electoral sin mayores pruebas, se realizaron ayer los comicios generales que fueron cuestionados por el presidente Manuel Zelaya y sus seguidores.
De acuerdo a los primeros resultados, el candidato presidencial del Partido Nacional, Porfirio Lobo, aparecía en el primer lugar de las preferencias con el 51% de votos, seguido de Elvin Santos, del Partido Liberal, con un 34%. Sin embargo, las autoridades electorales no informaron sobre el total del número de votantes.
Tras el cierre de la jornada, Zelaya informó que según las actas y la información que maneja, la abstención del proceso electoral alcanzó al 75 por ciento de los electores, por lo que reclamó la nulidad de los comicios. “Habíamos avizorado que si la abstención superaba el 50 por ciento del padrón electoral las elecciones debían anularse”, dijo.
“En términos generales la abstención real va a estar entre 65 y 70 por ciento”, indicó, por su lado, el líder campesino Rafael Alegría. Radio Globo, uno de los pocos medios que transmite información del bando zelayista, también auguró fracaso de los comicios al sostener que la elección fue un fiasco que registrará un abstencionismo “sin precedentes” y que sólo podrá ser atenuado a través de un fraude electoral.
El Frente de Resistencia afirmó a través de un comunicado que la afluencia fue escasa “pese a la campaña de intimidación con amenazas penales a la población en general si no se presentaban a votar”.
Añadió que el pueblo resistió también “las amenazas de represión laboral que tanto el gobierno de facto y parte de la empresa privada han hecho a sus empleados si no demuestran haber ejercido el voto”.
Zelaya instó a la prensa internacional a mostrar las estadísticas del proceso al precisar que las elecciones siempre fueron una salida para las dictaduras, pero sólo cuando se logra un consenso nacional, cosa que no se dio en Honduras.“¿Quién garantiza que los resultados sean transparentes? ¿Dónde están los observadores calificados de América si ningún país está siendo certificado como observador?”, dijo.
Horas antes, corresponsales extranjeros confirmaron que muchas calles y plazas lucían desiertas y que las mesas de sufragio no mostraban las “filas de cuadras y cuadras” de votantes, que anunciaban los voceros del gobierno de facto.
En Portugal, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó que su gobierno “no tiene nada que repensar” en relación a Honduras y que, por tanto, no reconocerá el resultado de las elecciones.
“En el caso de Honduras, tuve una conversación con (el canciller) Celso Amorim y le he dicho que Brasil no tiene por qué repensar nada”, dijo Lula al llegar a la XIX Cumbre Iberoamericana.
Fuente: Diario La Primera.
___________________________________
_____________________
______
_____________________
______
No hay comentarios:
Publicar un comentario