En el año 1996, durante la dictadura
Fujimorista, se emitió el Decreto Legislativo 882 de promoción de la inversión
privada en la educación. Esto significó que el Estado dejó de asumir su rol de
promotor de la educación y decidió que este vació fuera llenado de cualquier
forma por los privados. Igual que hizo con nuestros recursos, con los servicios
básicos, con el transporte publico. Fujimori permitió la aparición de negocios
de la educación, sin siquiera establecer criterios para el control de la
calidad.
¿Y qué han hecho los gobiernos de
turno, el Ministerio de Educación para revertir, atenuar o salvar esta
situación?
N a d a, por el contrario, aplaude,
goza, se felicita y hasta promueve ese tipo de ausentismo y la deserción de los
alumnos, maltrata y despotrica de sus maestros; es decir, el estado que debe de
ser el promotor (como en el caso de los privados), se convierte en el causante
para que suceda todo esto, y no es que en las instituciones privadas las cosas vayan
bien, eso es un mito.
Basta darse una vuelta por su barrio y
verán cómo una casa común y corriente funciona como un colegio, sin prestar las
condiciones o facilidades mínimas para una buena educación. Frente a eso, ¿Quiénes
gozan y quiénes patrocinan esa proliferación? El estado, señores; vean cómo en
muchos de ellos están amontonados o hacinados nuestros niños o estudiantes, no
tienen pasadizos amplio, menos campos deportivos, ni siquiera cuentan con un
patio; pero el estado, bien gracias, facilita, promueve, difunde, avala, reconoce,
legaliza y legitima la competencia desleal.
Tenga en cuenta que actualmente el gasto en
educación es el cuarto más grande de las familias peruanas, luego de
alimentación, casa y vestido: Las familias están cambiando y tienen nuevos
intereses. Los ingresos de los hogares no provienen solo del aporte del hombre,
sino también de la mujer moderna que trabaja. Los padres aspiran a mejores
condiciones de vida y, aunque prefieren tener menos hijos, también invierten
más en ellos.
Hace algunos años, los padres eran menos exigentes con la educación primaria, y solo a partir de secundaría invertían en un colegio "mejor" que preparase a los niños para la universidad.
Actualmente se sabe que un buen alumno se forma desde pequeño. Solo así podrá ser un buen universitario y, luego, un profesional competente. Un ejemplo del avance de este clima competitivo es el éxito de los colegios preuniversitarios.
SABÍA QUE
Hace algunos años, los padres eran menos exigentes con la educación primaria, y solo a partir de secundaría invertían en un colegio "mejor" que preparase a los niños para la universidad.
Actualmente se sabe que un buen alumno se forma desde pequeño. Solo así podrá ser un buen universitario y, luego, un profesional competente. Un ejemplo del avance de este clima competitivo es el éxito de los colegios preuniversitarios.
SABÍA QUE
-
Inversión familiar
Los
padres destinan 8% de sus ingresos mensuales a educación.
-
Rango amplio
Las
pensiones fluctúan entre S/.140 y US$1,200 al mes, según el grupo Educación al
Futuro.
-
Colegios especializados
Invierten
en tecnología y en educación bilingüe.
CONSULTA
CONSULTA
Rebeca
Velasco - Promotora del Lima Villa College
¿Qué la motivó a
abrir un colegio?
Estoy
en este rubro desde hace 27 años. Me involucré porque quería ser parte de un
nuevo sistema, algo que contribuya a que los niños sean más creativos, un lugar
que enseñe de una manera dinámica y con técnicas personalizadas.
¿Cómo se logra el
éxito en este negocio?
Hay
que respetar el estilo de aprendizaje de cada alumno. Además, hay que
enseñarles a los padres y hacerlos participar en este proceso de enseñanza que se
les brinda a los hijos.
¿En cuánto tiempo
logró recuperar la inversión?
Cuando
yo empecé invertí muy poco porque alquilaba una pequeña casa. Luego de unos
años destiné cerca de US$750 mil para un local propio, más amplio y que me
permitía brindar todos los servicios que los niños necesitan. Habré demorado
unos cinco años en recuperar ese dinero, pero no me arrepiento de nada de lo
que hice.
¿Es un negocio
rentable?
Es
rentable en la medida en que creas un futuro mejor para los niños. Además, como
profesional, eres parte de ese proceso de crecimiento y maduración.
¿Qué les aconsejaría
a quienes desean ingresar en este sector?
Primero,
que tengan mucha vocación, que piensen que esto es una inversión a largo plazo
y que se preocupen más por la educación.
Fuente:
Perú 21.
1 comentario:
Muchas gracias al blog por los consejos para poder formar empresarios del futuro.
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